Resumen: La supremacía del color verde.

A pesar de las predicciones de decadencia del dólar estadounidense, la realidad muestra que sigue manteniendo una influencia significativa en las finanzas globales. Cerca del 90% de las transacciones de cambio de divisas involucran al dólar, y el 58% de las reservas internacionales globales están en activos denominados en esta moneda. Factores como la liquidez y profundidad de sus mercados financieros, su papel como activo refugio global y la ausencia de competidores sólidos han contribuido a su fortaleza.

Aunque Estados Unidos enfrenta desafíos como su enorme deuda pública y la polarización política interna, no hay razones suficientes para prever la pérdida de circulación o influencia del dólar a corto plazo. A pesar de los intentos de otros países por debilitar su dominio, como el uso del renminbi en ciertos intercambios bilaterales, la realidad actual muestra que el dólar sigue siendo la moneda dominante en la economía global.